Para las obleas de chocolate:

Ablanda la mantequilla y pon todos los ingredientes en un procesador de alimentos. Batir hasta obtener una mezcla homogénea. En una hoja de papel para horno, o mejor aún en un tapete de silicona, formar la mezcla en cuadrados de 1½" de aproximadamente ¼" de grosor. Hornear a 162°C durante 2 minutos. Dejar enfriar y guardar en un lugar seco y fresco.

Para la gelatina de cítricos:

Ablanda la gelatina en agua fría y exprime las naranjas. Calentar el agua en una cacerola pequeña con el azúcar y añadir el zumo de naranja previamente filtrado. Añadir la gelatina exprimida y el agar agar. Mezclar enérgicamente, llevar a ebullición y retirar del fuego después de un minuto.

Verter el líquido en un molde rectangular bajo para crear una capa de aproximadamente ¼" de grosor y reservar para que se enfríe. Cortar la gelatina del mismo tamaño que los cubos de queso ricotta.

Para el cubo de queso ricotta horneado: Mezclar el azúcar con el queso ricotta y colocar en un molde de silicona para plum cake. Hornear durante dos horas, la primera a una temperatura máxima de 120°C y la segunda a 150°C. El resultado debe ser una especie de "plum cake muy seco y dorado". Dejar enfriar y cortar en cubos de 1¼". Para montar el plato: cubra dos lados opuestos del cubo de ricotta con gránulos de pistacho, colóquelo en un plato de servir y coloque encima el cuadrado de gelatina de naranja. Apoyar los barquillos de chocolate en los dos lados libres y decorar con un par de hojas de menta y un chorrito de chocolate fundido.