Prepare la masa. En un tazón grande, bata la harina, el azúcar y la sal, y reserve. 
Mezcle la leche y la mantequilla en un tazón pequeño, y caliente en el microondas o en la estufa hasta que la mantequilla se derrita. Añada la levadura y bata hasta que se disuelva. Vierta esta mezcla en los ingredientes secos. Añada el huevo y bata a mano o utilice una batidora de pedestal con un accesorio de pala hasta que se forme una masa suave. 
 
En una superficie ligeramente enharinada, amase la masa durante 3-5 minutos formando una bola lisa. Añada un poco de harina si está demasiado blanda o pegajosa. Coloque la masa en un tazón ligeramente engrasado, cúbrala con un paño de cocina limpio y déjela reposar. Mientras tanto, prepare el relleno. Pique en trozos los pistaches en un procesador de alimentos. Mezcle la canela y la azúcar morena. 
 
Transcurridos 10 minutos, extienda la masa hasta obtener un rectángulo de aproximadamente 35x20 centímetros. Extienda la mantequilla atemperada por encima y espolvoree la superficie con la mezcla de canela y azúcar morena. Haga lo mismo con los pistaches picados. Enrolle la masa por el lado más largo hasta formar un tronco de 35 centímetros y córtelo en 10 rollos más o menos iguales. Colóquelos en un molde para hornear redondo de 25 centímetros engrasado o en un molde para hornear cuadrado. Deje espacio entre ellos. Cubra con un paño de cocina limpio y coloque el molde en un lugar cálido durante 60-90 minutos. 
 
Mientras los rollos aumentan su volumen, prepare la crema de pistache. Puede quitarles la piel a los pistaches hirviéndolos durante unos minutos y frotándolos con un paño de cocina para realzar el color verde, pero la crema será igual de sabrosa si se omite este paso. Vierta los pistaches, la leche y 1 cucharada de azúcar glas en el procesador de alimentos. Mezcle durante unos 5 minutos, raspando los lados del recipiente del procesador aproximadamente cada minuto, hasta que los pistaches se conviertan en una pasta suave. Caliente la mantequilla y el chocolate blanco en una cazuela hasta que se derritan. Vierta la pasta de pistaches en una batidora y después añada la mezcla de chocolate blanco derretido. 
 
Caliente el horno a 375°F o 190° C. Una vez que los rollos doblen su volumen, colóquelos en el centro del horno y hornéelos durante 25 minutos o hasta que estén ligeramente dorados. Retírelos del horno y coloque el molde sobre una rejilla para que se enfríe un poco. 
 
Mientras los rollos aún estén tibios, no calientes, esparza por encima la crema de pistache con un cuchillo o una espátula para glaseado. Cubra bien los sobrantes y guárdelos a temperatura ambiente.